miércoles, 13 de junio de 2012

La belleza

Nada quiero razonar acerca de la idea de belleza. Esa cualidad, que ponemos en lo externo o en lo interno, está íntimamente relacionada con la forma.
Y la forma proviene de nuestro valor cultural y de como hemos ido introyectando el valor.
Para mi la belleza es contemplación. No dudo que puedo hacerse en el vacío, en esa aparente nada que se produce cuando nuestra mente se desocupa de contenidos.
Y creo que también puede contemplarse sin apego. La imagen que os propongo es para eso. Para ver, dejar que se produzca el contacto, visual en este caso, y apartar cualquier otro pensamiento, o deseo o apropiación.
Y entonces puede que aparezca otra cosa...

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Y entoces puede que aparezca otra cosa ............!Sodomia!?...... sin comentarios. Cada quien con sus preferencias.

Ch dijo...

Un culo es un culo es un culo es un culo...
No quiero ser irrespetuosa sino honesta. Lo que se me hace fugura en esta foto es el culo, un culo perfecto, de anuncio de celulitis, me lleva a mucha reflexión, he de reconocerlo, me inquieta no ver a la mujer completa, me lleva a la comparación, que no consigo evitar aunque quiera abstraerme, me parece una buena foto y me parece que daría para mucho en un ejercicio proyectivo, en un grupo, donde cada uno pudiera comentar lo que le sugiere...y se me antoja un experimento interesante.

Anónimo dijo...

Un individuo viendo un cisne en un lago comentó a su compañero ¡Mira, que cisne, me apetece desplumarlo y asarlo!

Ch dijo...

Me parece muy lógico, ese hombre tenía hambre, cuando uno tiene una necesidad, busca en el campo lo que le permita saciarla.
Me parece que cada cual ve el mundo en función de sus necesidades y que sólo cuando las más vitales están cubiertas puede pasar a otra cosa...

miguel albiñana dijo...

Puede ser Ch, pero tampoco se puede pasar por alto que a veces vemos el mundo mediante un único prisma... Así por ejemplo alguien puede tener necesidad de cazar elefantes en 2012 pero ¿es eso lo que realmente necesita?

Ch dijo...

Es cierto, somos bichos complejos. Yo ahora sé un poco más de lo que me inquietaba en la imágen, me conecta con vulnerabilidad...agradezco tú respuesta,Miguel,me aclara y me acerca más a tú propuesta.

Sandovictor Hugo dijo...

¿Quién es el autor de esta imagen?

Raquel G. dijo...

El autor es uno que -a buen seguro- no se dedicaba a cazar elefantes (eso va quedando para los que confunden el culo con las témporas). Hay caderas que rotas están mejor para invitar a la reflexión y para (quizá) empatizar con el dolor del elefante herido. En fin. No digo ná y lo digo tó.
Un abrazo.

Ch dijo...

El ser humano depredador sigue existiendo y coexistiendo con esos otros humanos más “evolucionados”. ¿Acaso no existe dentro de cada uno un depredador? ¿Negarlo no es como negar la sombra? En todo hay grados, claro, reconocer el impulso no significa lo mismo que seguirlo.
Voy a lo de la convivencia. Yo puedo alimentar mí conciencia y mi consciencia, pero ¿qué ocurre cuando uno de estos seres voraces y arcaicos me quiere comer? En ese caso no puedo esperar disuadirle con mis elevadas razones, me tengo que defender o prepararme a acabar en su estómago.
Me parece que éste es un dilema muy antiguo que, al menos para mí, sigue sin tener solución. Ha habido mártires capaces de sacrificar su vida por ser congruentes con sus convicciones, pacifistas capaces de amar y perdonar incluso a sus verdugos, aquellos que permanecen en las cavernas y se mueven por sus más básicos instintos.
Yo amo la belleza, desde niña me ha fascinado el arte, para mí un alimento sin el que no hubiera podido sobrevivir, y luego está la realidad, la vida que es lucha, que impone sus condiciones inexorablemente y sin compasión.
Leo sobre y quiero creer que la confianza en los recursos infinitos del universo hace que todo lo que necesitamos aparezca en el camino, no se si es cuestión de creer, no se si siempre funciona, sigo en ello, luchando por recuperar la fe, poniendo una vela a Dios y otra al diablo…por si acaso!.

Anónimo dijo...

Bueno Raquél, estás sembrada! qué risa con el regio cazador de elefantes (al que por cierto parece que también le gustan las hermosas caderas).
Ch, se me ocurre decirte que en este universo cuyo tiempo nos toca vivr hay de todo, arte y noesasrte, compasión y depredación, suerte y malasuerte, fe y duda, dios y diablo...
Vacas flacas y vacas gordas...
Fácil o más fácil es ser optimista cuando las cosas van bien. Dificil serlo cuando van mal...
Dificil seguir las enseñanzas del libro de Job...


miguel

Raquel G. dijo...

Ay, Miguel; Dios me libre de profundizar en el conocimiento de los regios gustos, no se me vaya a agudizar este leve prognatismo -tan característico de cierto real linaje-.

Tú sí estás sembrado, que me tienes cavilando lo que evito. ¿Polaridad de castidad? Una faena darse cuenta de esto pre-tendiendo al mismo tiempo esquivar categorías. Tengo entendido que un tal Kinsey se dio al desenfreno carnal de tanto como categorizó e intentó clasificar conductas. Algo de esto me tiene atribulada, por si me (a)salta la polaridad negada y me pierdo en desenfrenos inauditos. Vaya usted a saber si esto es lo evitado...

Un abrazo.

Anónimo dijo...

mmm así que desenfreno=tribulación= polaridad negada_= evitación... sigue tu Raquel...
un beso
MIGUEL

Raquel G. dijo...

Yo diría más bien que
Desenfreno= polaridad negada.
Miedo al desenfreno= evitación.
Polaridad negada + evitación + tirar (un poco) de la manta= tribulación.

Quizá el remedio esté en tirar del todo de la manta... Ya sigo yo con ello, aunque me da que puedo terminar clasificando elefantes o cazando avispas, quién sabe. Dice mi amigo F que el truco está en echarse en los brazos del otro con un poquito más de conciencia para no perderse del todo y hallar el camino de vuelta. Esto me huele a una cuestión de conocer los límites propios y ajenos para salir de la guarida con más confianza en... TODO, jaja.

Como veo que me estoy poniendo muy Kinsey, salgo a tomar el aire con mi con-ciencia de avispa.

Un beso.