Eleusis: mitos y realidades presentes
Al llegar a Eleusis, unos restos
arqueológicos situados en la actual ciudad de Elefsina, mi ánimo se quedó
inane. La ciudad es una barriada lejana de Atenas, cercana al puerto del Pireo.
Casas y calles rodean lo que fuera el gran santuario de Demeter, en una colina
hoy llena de piedras sueltas y alguna columna.
Una de esas grandes columnas
caídas muestra con su tamaño la grandeza del lugar en el pasado.
Hace muchos años llegó a mis
manos un librito que hablaba en términos esotéricos y algo idealistas de “Los
grandes iniciados” (E. Schuré, Ed Lidium 1986). En uno de los capítulos, relata
el diálogo eleusino y la relaciones entre los Misterios con los ritos órficos y
pitagóricos, así como la versión de Platón.
Las escasas páginas dedicadas a
los rituales de Eleusis me impresionaron. Tanto que, para mi, iniciado por
entonces en ciertos misterios, resultó un apoyo fundamental para entender como
me sucedían las experiencias que por entonces atravesaba y que, de alguna
manera, estaban sujetas también a un tipo de silencio.
Fue por aquél entonces cuando
tomé la decisión de fundar un Centro a mi regreso a España. Un Centro que
llevaría el nombre de Eleusis en honor y en recuerdo de todos aquellos que
pudieron alcanzar la sagrada visión y que supieron mantener el secreto ritual
como iniciados.
Poco tiempo después, en mi afán
por entender y resituar las experiencias que sucedían en mi vida a lo largo y
ancho de un intenso proceso personal de carácter terapéutico, me asomé a la
visión más científica de “El camino de Eleusis”, (Wasson, Hoffman, Ruck, FCE 1993). La versión de Wasson
incluye sus intuiciones sobre el uso del cornezuelo del centeno en los rituales
para potenciar la expansión de la conciencia y pone de manifiesto el carácter religioso
de las ceremonias. También revisa la importancia de la visión que tenía lugar
en el santuario y que estaba al alcance de los iniciados.
Desde entonces, el mito de Perséfone
ha estado siempre presente. Si el mito ha sido creado por el hombre para tratar
de dar forma a algo inefable o inexplicable, entonces Demeter y Perséfone, en
su historia con Hades, manifiestan de una manera hermosa y clara como la vida
se presenta ante nosotros.
Mientras la vida habitada por la
diosa es inefable y eterna, la de su hija se ve sometida a los avatares del
tiempo. Muere en invierno, al igual que la espiga de trigo. Y resucita en
primavera y alimenta a los hijos de la Tierra.
Esos hijos que, representados por
Perséfone, nacen y mueren en su propias estaciones, mientras la vida se
mantiene.
Y gracias a ese rapto del Señor
de la obscuridad, del hermano de Zeus poderoso, de Hades, Demeter enseña a los
humanos, representados ahora por Triptólemo, como cultivar el grano y como
sobrevivir a los avatares del tiempo y de las estaciones. Ese Triptólemo a
quien el azar ha arrebatado la vida eterna. Pero que, desde su humanidad, nos
enseña el don de vida de la diosa.
Y cuando atravieso la historia de
otras personas que vienen a orientarse para tratar de entender su existencia, en la medida que
quieren solucionar sus problemas, me acuerdo de Eleusis. El secreto, la iniciación
a una vida diferente, la renuncia a esquemas o constructos caducos y la realidad
de que la muerte acompaña permanentemente a la vida y viceversa.
Porque el proceso terapéutico no
resuelve el dilema de la muerte y sí que ayuda a entender y a asumir la existencia.
Y las limitaciones a las que terapeuta y paciente están sometidos en nada quita
la validez de la búsqueda de una vida nueva.
Y en este sentido, todos hemos
pasado o pasamos por Eleusis. Cada uno tiene su peculiar visión de la diosa.
Cada uno sabe que pasa una
temporada en el Hades. Y que el río de la desmemoria nos obliga a empezar de
nuevo.
1 comentario:
Tus paseos parecen ser hermosos, se te ve muy satisfecho por esa realizacion, te felicito, en hora buena , mi querido Miguel. Disculpa que la locura este conmigo en este comentario que le voy hacer; A la Totalidad, al Sol,al Dios, a la Divinidad, Zeus-Hades, se la representa con un circulo y su punto central, que simbolizan, el uno en el punto central, y su infinita manifestacion en su circunferencia, que tiene infinito numeros de lados, soy parte de esta Totalidad, me encuentro en un punto de su infinita manifestacion, en la circunferencia, desde cualquier punto que uno se encuentre en la circunferencia, ya sea en la luz o en la sombra; su dual manifestacion; esta a la misma distancia del centro. Cualquier punto de la circunferencia puede alcanzar el centro.De uno depende encontrar el camino hacia el centro. Sostener Conciencia de dicho centro desde la circunferencia en actuar y vivir en estado de meditacion. Cualquier cosa que se realiza desde esta Conciencia sera correcta, aunque aparentemente nos mareciera que no es asi. Cualquier cosa que se realize desde la Inconciencia de ese centro (mente),siempre estara equivocada, incorrecta ,aunque aparentemente nos pareciera que no es asi. Desde la Conciencia (centro),uno actua ,no reaciona. Desde la periferia(inconciencia)uno reacciona ,no actua. Desde el actuar (Conciencia),no se produce karma, porque se actua desde el Ser (centro).Desde el raccionar(inconciencia del Ser), se produce karma, por que se reacciona desde el ego. Salud hermano ,que estes siempre bien.
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