lunes, 31 de octubre de 2011

proverbio hopi


"La flecha que no tiene destino nunca se pierde..."
(Dedicado a todos los que no dan un paso sin chancleta)

18 comentarios:

Anónimo dijo...

"La flecha que no tiene destino nunca se pierde". Se parece al estado de NO-MENTE. que simplemente ES. En el Vacio ,el Silencio,en la Totalidad, sin metas,ni destinos que alcanzar. Igual que la gota que se pierde en el oceano y se funde en el. La flecha sin destino no se pierde se funde en la Totalidad.Que bueno es no tener metas ni destinos que alcanzar,Es vivir sin angustias ni ansiedad,es fundirse en la libertad ,la totalidad.! AJO !

Raquel G. dijo...

Como todo el mundo sabe, la chancleta está para tirársela a algún gobernante déspota a modo de recordatorio popular. A partir de ahí, sólo queda huir como una flecha hacia destino incierto, que viene a ser lo mismo que no tener destino ;-)

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Si no se pierde tampoco podrá encontrarse.
Raquel,el gobernante déspota probablemente se quede la chancleta y tú te quedarás con una chancleta desparejada...ummm...

Raquel G. dijo...

Bah, no hay problema, le lanzo las dos y así podré dar varios pasos sin chancleta(s)... Además, ¿quién necesita unas chancletas para ser amablemente reducida y arrastrada por los guardaespaldas? En estas cosas -igual que en el lecho- cuantos menos complementos, mejor ;-)

Anónimo dijo...

!AJO!Raquel:En el lecho,como en el espiritu;se necesita estar totalmente despejado,sin cargas,lijeritos,habiles y en constante comunion con El Gran Misterio. La flecha no se puede encontrar, por que se ha convertido en un misterio,que sera parte del Gran Misterio. !AJO!

Anónimo dijo...

Si el héroe no sale en busca de la flecha se quedará en la aldea, no se enfrentará a lestrigones ni a cíclopes, no arribará a puertos que antes ignoraba, y , desde luego, quedará muy lejos de oler siquiera que existe el gran Misterio.

Anónimo dijo...

El Misterio puede,debe ser constantemente y eternamente buscado pero jamas sera enconterado. Al encontrarse dejaria de ser Misterio.!AJO!

Ch dijo...

Pues yo creo que la flecha siempre tiene un destino, aunque no se lo dé el arquero, por eso la flecha nunca puede perderse, aunque parezca lo contrario...

Raquel G. dijo...

Completamente de acuerdo en lo del lecho y el espíritu, querido anónimo.

Querido anónimo 2: ¿no será que el héroe es la flecha misma?

No sé qué significa esto de "!AJO!", pero me gusta y te lo plagio... !AJO!

Un abrazo. !Perejil! (y una chispa de chile rojo)

Anónimo dijo...

!AJO! es una expresion de saludo o admiracion,aceptacion que tenemos en las ceremonias de fuego sagrado de ITZACHILATLAN que son diriguidas por los chamanes indiguenas de America norte ,centro y sur,Cumpliendose con la profecia de la union del aguila y el condor. Ellos separan los generos y la mujer para lo mismo dice !AJA!

Raquel G. dijo...

¡Anda!, qué interesante. Gracias por explicármelo. Con tu permiso, lo adopto. Un abrazo.
¡AJA!

Anónimo dijo...

En todo caso sean la flecha y el héroe uno solo ¿conviene no tener destino? ¿no irán dando tumbos?¿acaso se lanzará una flecha sin destino? Tener un destino no implica que uno necesariamente vaya a llegar al que se propuso antes de partir. Quizás el destino importe poco-como bien dice Kavafis en su poema- pero da una dirección que el viaje probablemente cambiará llegando finalmente a lugares desconocidos y transitando misterios varios. En fin, yo de ir dando tumbos por la vida sé bastante y no creo que se aprenda mucho de ello.

Ch dijo...

Me refería a éso, creo que el destino se va revelando a lo largo del camino y probablemente sólo al final del mismo se pueda comprender su sentido.

Sandovictor Hugo dijo...

YO que me siento una flecha sin destino debo decirte: Gracias! Esa frase parece hecha para mí. Et me tombe à pic. Merci!

miguel albiñana dijo...

J'en suis bien heureux... caminanate no hay camino...
se hace camino al andar...

Raquel G. dijo...

Querido anónimo, no se me ocurre otra forma de aprender que no sea dar tumbos por la vida. Yo también me siento un poco saltamontes, y a veces decaigo por no encontrar un destino fijo. Sin embargo, creo que la belleza de vivir también está en seguir trotando, cayendo y levantándose, como los niños, que suelen tener un alma abierta a lo que venga y siguen trotando por muchas heridas que tengan en las rodillas.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Raquel el destino de todos es comun,es alcanzar el centro,donde te encontraras como SER;con una aceptacion total de tu ser sin centro.Tienes que encontrarla manera de entrar a tu Centro(hay mucha maneras de lograrlo,todas validas)donde entraras en comun-union con el SER. !AJO!

Ch dijo...

Esto de la flecha, y posteriores comentarios, me ha hecho pensar…en el destino. Supongo que lo de creer en él o no es una cuestión de elección, o de necesidad. Puede que haya quien necesite darle un sentido a su existencia, puede que otros no. Es éste tema me alineo con Viktor Frankl, cuando dice que todo hombre (entiendo que también mujer) busca un sentido a su existencia, que para mí no es otra cosa que buscar su destino.
Si el destino está prefijado o no es otro asunto, es como lo de creer en los viajes en el tiempo ¿se puede viajar al futuro?, si la respuesta fuera afirmativa, esto querría decir que todo está ya determinado y, además, que todo está sucediendo continuamente y que, por tanto, no existe la libertad de elección y la flecha no puede ir más que a un lugar. Si el futuro no existe aún, entonces puedo elegir andar por uno u otro camino, decidiendo, aunque no controlando, dónde quiero ir. Esto me lleva otra vez al pensamiento de la muerte, que es el destino de todos…bueno, pararé un poco antes.
Escudriño dentro de mí, hay, me parece, una convicción ahí, anidada en algún rincón, de que existe un lugar para cada cual, y lo tengo que decir también de mí, y que esto de la vida es como hacer un puzle, que uno va buscando dónde mejor puede encajar y no se puede descansar hasta que se encuentra aquel lugar, único y especial, donde todo coincide, donde no sobra ni falta espacio por ningún lado, donde las piezas alrededor están también en su sitio. Esta es la imagen que me viene a la mente, no sé si tiene que ver con mí afición, más pasada que presente a éste “pasatiempo”. Pero si me parece que yo estoy así, buscando el lugar. No es absoluto, si lo pienso, sé que lo tengo junto a mis hijas, y en otros ámbitos quizá, y a la vez sigue viva la sensación que durante mi vida he tenido de no encajar, de ser la pieza discordante. En este momento me inclino a pensar que esta sensación es producto de no haber tenido espejos que me devolvieran la imagen de que estaba bien tal y como era. Otra parte de mí se niega a creer que sólo sea esto y quiere que me fíe de éste desasosiego que me lleva a seguir buscando. Y una tercera voz, que parece la de la sabiduría, me dice que cuando esté a gusto en mí piel, allí donde me encuentre sentiré que ése es mi lugar….
Como otras veces me encuentro con que hay tantas facetas y posibilidades que es difícil elegir y quedarse con una, y, recordando el símil que hacía Perls, me quedo pelando la cebolla.