jueves, 20 de octubre de 2011

Re-flexión


Yo no soy ni devengo aquello que quiero, pues creo que solamente existe en mi aquello que puedo ser.
Me limito a indicar cual es mi camino por si a alguien le sirve, sabiendo que cada uno tiene el suyo y que habrá de descubrir.
Trato de desapegarme del desapego con la misma impasibilidad que del apego. Desconozco que es el Ser, fuera de lo que percibo en el eterno presente.
Consciente de mis limitaciones, a medida que mi edad avanza, es probable que finalice mi existencia en este sencillo ser. Aprecio el camino de los otros si les tiene contentos y no hacen daño a los demás y les agradezco que compartan sus experiencias con nosotros.
Finalmente, sé demasiado bien que a veces no se alcanza la siguiente estación, pues llega el final de la vida antes. Así que, por ello, aún gustándome la primavera más que las otras estaciones, me dejo llevar por el otoño, con sus colores, sus primeros vientos fríos y la caida de las hojas.

9 comentarios:

Ch. dijo...

Quizá la única verdad cierta e inamobible en la vida es que un día acabará, y cumplir años me recuerda ésto. Yo también llegué a la vida un otoño y me identifico con ésta estación, aunque no rechazo las demás. Aún no consigo estar en paz con mí muerte, aunque intento pactar con ella para que cada una tenga lo suyo. Leo lo que has escrito y me llega...también me entristece y me asusta, sobre todo si pienso que tras muchos encuentros puede que no te haya visto...
Un abrazo

Anónimo dijo...

Miguel, por favor , no sientas esta nostalgia que me hace entristeser,tengo una parte de mi muy apegada a tu ser,me siento muy bien al poderme comunicar contigo e intercambiar las experiencias vividas en busqueda de la Realizacion Espiritual. Cada quien por su lado,Igual de validas todas las busquedas, que nos han dado tantas satisfacciones,al acercarnos cada vez mas a la Totalidad, naci en el comienzo de la primavera y mi ser esta constantemente floreciendo,igual que la primavera;el sol en mi tierra nos bagna de tal manera que nos llena de energia y vitalidad. somos tierra caliente, efervecente,burbugeante llena de infinidad de hermosas experiencias. Agradezco a la Totalidad(Divinidad,Gran Espiritu,Existencia) por todas las Bondades que entrega a cada una de la totalidad de su creacion. Que bueno que en esta vida nos hemos acercado lo mas que hemos podido a EL. Tu vida Miguel llena de logros y realizaciones que nos han ayudado tanto a transitar por lo sendero de la espiritualidad; no te apegues a nada ,camina liviano para poder levantar el vuelo en el momento que toque ser.Siempre estas en mi memoria en mi realidad virtual,gracias por haberme ayudado a tener tanta seguridad en mi mismo.Me senti apreciado y querido a tu lado.Que bien que te cruzaste por mi camino; que buen karma.Muchas gracias

Raquel G. dijo...

Querido Miguel, te apegues o no, sientas nostalgia o no, yo me siento gratamente acompañada cuando estás cerca, y también cuando no lo estás, a través de este compartir de vivencias, reflexiones y sentimientos.
Yo también siento nostalgia en otoño. Me gusta pensar, sin embargo, que ese desconocido Ser con mayúscula no es otra cosa que todos y cada uno de nosotros transitando las estaciones a pesar de -y gracias a- toda incertidumbre.

Un abrazo.

miguel albiñana dijo...

Para Anónimo. Gracias por tus palabras que he sentido cercanas y humanas. Me resulta más fácil comunicarme dsde el ser que desde el Ser... pues claro que cosa tan normal! hasta me hace sonreir.
Me alegra que tengas y conserves ese buen recuerdo del encuentro lejano en el tiempo.Sí creo qeu tu sensación de sentirte querido y apreciado fue real, aunque ahora los años hayan ensombrecido la experiencia.
Y el tren que no se tomó ya no se puede tomar, así que no me apego a lo que no pasó, pero mi pasado me pertence, como a ti el tuyo, y conforma mi individualidad.
Pienso que el apego tienenque ver con no ser capaz de vivir el presente. Pero ello no me priva de mi pasado ni de mis recuerdos.
Om shanti

miguel albiñana dijo...

Querida RAquél, me gusta esa reflexión del Ser como eterno presente. Lo hace más asequible a mi aprehensión.

Anónimo dijo...

El tiempo,aca, no ha ensombrecido nada;lo ha hecho leyenda dorada, brilla y refulge,de forma unica y hermosa.Hoy tengo ceremonia, voy a pedir por tu salud y bien-estar. Radha Soami.

Charo Soria dijo...

Desde mi experiencia, Miguel, de mi encuentro contigo, veo difícil que nada pueda ensombrecer las experiencias que muchos hemos tenido siguiendo tu senda hecha de manos Reales, de miradas atentas y acogedoras, de cabelleras pelirrojas, plateadas, rubias y morenas. De risas, de dulzura, de campechanería, de ironía, de sabiduría, de placer . Pre-esencias que aún siento como suaves caricias enraizadas en mi ser.
Encuentros. Para mi la Vida son encuentros y contigo encontré.

Mi hija cuando no encuentra algo dice “no lo busco, mamá” y cuando le digo “cariño” me dice “yo ero Alma, no ero cariño... “ porque aún no sabe decir SOY, tiene dos años, yo tarde casi 40 en aprender a decir: Soy.
Cuando me proyecto al futuro, me canso, me agobio, me entristezco, me desbordo... me desbordo... y me vuelvo de un borde insoportable, un borde insoportable... el que me contiene... espacio/tiempo y acción en armoniosa e inevitable unión vital.
A mi lo que se me hace obvio es que tú, querido Miguel, al escribir tu re-flexión, VIVES, nostálgico, apegado o desapegado... y te dejas llevar por este otoño, que tan bien huele, por cierto... tú, que a mi (como a otros tantos agradecidos), me llegaste y me llevaste otoñal, más a través de una rama de hojas rojas que la Victoria hizo mujer y de otra rama hermanada con extraños brotes cual ojos del color de mar.
Gracias Miguel y te deseo... la alegría desnuda fluyendo por tus venas, por que la vida que ya te la deseé una vez de la misma guisa y por el mismo sitio, la tienes.

miguel albiñana dijo...

Muchas gracias por tu comentario Charo. Es sensible y me llega al corazón.
Un abrazo

Sandovictor Hugo dijo...

Me gustó cómo comenzaste: "Yo no soy ni devengo aquello que quiero, pues creo que solamente existe en mi aquello que puedo ser". Me quedo con esa frase. Y finalmente ¿el desapego del desapego? Uno de tus mejores artículos.